Congelar la cebolla para no llorar

05 Ago Congelar la cebolla para no llorar

Cortar cebolla puede convertir cualquier receta en una experiencia llorosa. Sin embargo, existe un truco de cocina simple y comprobado: congelar la cebolla antes de cortarla. Esta técnica puede reducir significativamente la producción de lágrimas al manipular este vegetal tan común pero potente.

¿Cómo funciona este truco?

Refrigeración o congelación previa:
Antes de picarla, colocá la cebolla en el refrigerador por unos 30 minutos, o en el congelador durante 10-15 minutos. No es necesario que se congele por completo, solo que esté bien fría.

Menor actividad enzimática:
El frío ralentiza la actividad de las enzimas responsables de liberar un gas llamado syn-propanetial-S-óxido. Este gas es el que, al entrar en contacto con los ojos, provoca irritación y lágrimas.

Reducción de irritación ocular:
Al disminuir la cantidad de este gas volátil en el aire, se reduce notablemente el efecto lacrimógeno. Resultado: podés cortar cebolla sin llorar.

Este truco no afecta el sabor de la cebolla ni su textura si se corta y usa enseguida. Además, es ideal para quienes cocinan con frecuencia y quieren evitar molestias. Así que la próxima vez que enfrentes una cebolla, recordá: unos minutos de frío pueden salvarte de muchas lágrimas.